Wednesday, October 31, 2012

¿Riquezas Injustas?

En la Palabra
Lectura: Lucas 16 - 17

El capítulo 16 de Lucas comienza con una parábola de un mayordomo infiel, que cuando fue acusado, usó de sagacidad para recobrar algo de lo perdido. El Señor lo encomendó diciendo: “Ganad amigos por medio de las riquezas injustas, para que cuando éstas falten, os reciban en las moradas eternas” (v.9) Con este ejemplo les enseñó que el que es fiel en lo poco también lo será en lo mucho. “Porque si en las riquezas injustas no fuisteis fieles, ¿Quién confiara lo verdadero?” (v.12) No se puede servir a Dios y a las riquezas. En este capitulo también habla de la historia del rico y un mendigo que se llamaba Lázaro. El rico nunca puso atención del mendigo y cuando murió fue al infierno. Lázaro cuando murió fue llevado por los ángeles al paraíso.  El rico quiso de varias maneras poder ser ayudado en su tormento, o que Lázaro regresara de los muertos para advertir a su padre y a sus cinco hermanos que no fueran a ese lugar de tormento. Pero se le dice que ellos  tienen a los profetas y que si no los escuchan a ellos, tampoco creerán aunque alguien se levante de los muertos. En el capítulo 17 enseña, entere otras cosas, acerca del deber del siervo, el cual siempre debe estar dispuesto a atender a su Señor y no el Señor atenderlo a él. En la historia de la sanidad de los 10 leprosos, solo uno regresa a dar gracias. La venida del Hijo del hombre será como en los días de Noé, donde el pensamiento del hombre era de continuo el mal, la inmoralidad y la violencia eran cosa de todos los días.

En la Práctica
La enseñanza de la historia del mayordomo infiel puede sonar algo complicada de entender. De hecho alguna vez escuché a un testigo de Jehová, que tenía negocios, decir que Jesús enseña que se pueden hacer riquezas injustas. Sin embargo esto está en contra de la enseñanza del Señor Jesús donde le dice a los publicanos no cobrar mas de lo que es justo. Esta historia se esta refiriendo a ser fieles en las cosas de la vida cotidiana, las cosas del mundo (trabajo, estudios, impuestos). Si eres fiel en las cosas del mundo, de la vida diaria, Dios te puede confiar las cosas del reino. Cuando tienes un trabajo secular, lo haces bien, y prosperas, Dios te puede llamar al ministerio. Dios no llama al ministerio a los desocupados, a los que no saben trabajar. Todos los discípulos que escogió Jesús estaban ocupados. Dios nos llama a ser fieles en lo que estamos haciendo ahora y si somos fieles en ello, nos llamará en su tiempo para su obra.
La historia del rico y Lázaro nos enseña acerca de la realidad del infierno y la imposibilidad de una vez llevado a un lugar pueda salir de él. En este caso, salir del infierno. Las personas que no creen no creerán aunque alguien, en este caso Jesucristo, resucitara de los muertos. Las personas pueden creer por el testimonio de las Escrituras. 

En Oración
Señor, ayúdame a ser fiel en las cosas pequeñas, para que también sea fiel en lo mucho. Por Jesucristo, amén.

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