Thursday, March 29, 2012

Los Azotes y Tropezaderos de Tu Vida


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Para ver las predicas del pastor Alex: http://apexbaptist.org/#/en-espaol/videos

En la Palabra
Lectura: Jueces 1-2

Después de la muerte de Josué las diferentes tribus consultaron al Señor para ver quien seguiría con la conquista de la tierra. Judá fue la primera tribu la cual pidió ayuda de Simeón y juntos conquistaron varias ciudades, entre ellas, Jerusalén y Hebrón. José, es decir, Efraín y Manasés pelearon para conquistar Bet-el. El problema fue que no arrojaron a los habitantes de la tierra sino que se quedaron a habitarla con ellos. Tampoco Zabulón, Aser, Neftalí y Dan arrojaron a los habitantes de la tierra.
El Ángel de Jehová les recriminó el no haber cumplido con la Palabra del Señor por no haber arrojado a los habitantes de esas tierras. Estos se convertirían en azotes para Israel y sus dioses serían tropezadero.
Después de la muerte de Josué y toda esa generación, se levantó una generación que no conocía a Jehová ni la obra que había hecho por Israel. Así Israel comenzó a adorar a los dioses de aquellas naciones, a los baales y la imagen de Astarot. Por ello Dios los entregó a sus enemigos y cuando el pueblo clamaba Dios levantaba un juez que los liberará, pero después de la muerte del juez, Israel volvía a su idolatría. El Señor dejó de arrojar las naciones enemigas delante de Israel para probarlos si seguirían el camino del Señor.

En la Práctica
Es notorio la frase que se repite constantemente en el primer capítulo del libro de  los jueces. ¿Cuál es esta frase? “…tampoco arrojaron a …” Josué le advirtió al pueblo que estos pueblo se convertirían en azotes para Israel y sus dioses serían tropezadero. ¿Qué sucedió? Cuando murió la generación que entró con Josué a la tierra prometida, se levantó una nueva generación que no conocía a Jehová ni lo que había hecho por Israel y comenzaron a adorar a los baales y a la diosa Astarot. Una vez mas la Palabra de Dios nos enseña del riesgo de no obedecer la Palabra de Dios y de no enseñarla a nuestros hijos. El libro de Jueces relata la ciclos de desobediencia del pueblo, disciplina por parte de Dios entregándolos en manos de sus enemigos, el arrepentimiento del pueblo y la liberación que Dios les daba por medio de un juez. Muchas veces nuestra vida refleja estos ciclos, por un tiempo obedecemos a Dios, después nos comenzamos a alejar, el Señor nos disciplina y volvemos a El. Aprendamos del ejemplo de Israel; ¿qué es lo que se ha convertido en azote y tropezadero en tu vida? Echemos de nosotros aquellas cosas que no agradan a Dios y enseñemos a nuestros hijos la Palabra de Dios sobre todo con nuestro ejemplo para evitar que se olviden del Señor.

En Oración
Señor, tu Palabra es clara y nos advierte del riesgo de no obedecerla. Te pido me des sabiduría para vivir de acuerdo a tus principios y enseñarlos a mis hijos, pero sobre todos que ellos puedan ver en mi el ejemplo de un hombre que teme a Dios. Por Jesucristo, amén.

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