Wednesday, November 21, 2012

Lídres que Sirven



En la Palabra
Lectura: Hechos 7 - 8

En el capítulo 7 encontramos la historia del primer mártir, Esteban. Ante sus acusadores, Esteban narra la historia de Israel, desde el llamado de Abraham hasta la edificación del templo de Salomón, aunque, dijo Esteban: “el Altísimo no habita en templos hechos de mano….” (7:48). Esteban acusa al pueblo de haber rechazado la salvación de Dios, en José, en Moisés, y en los profetas y les llama necios (“duros de cerviz”), e incrédulos (“incircuncisos de corazón”) y de rebeldes al resistir al Espíritu Santo. El pueblo se enoja y lo apedrea hasta que muere. Esteban fue el primer mártir de la iglesia.
El capítulo 8 narra la historia del primer misionero, Felipe quien fue a la ciudad de Samaria a predicar el evangelio y la gente creía y cosas maravillosas sucedían. Inclusive un mago llamado Simón creyó, pero su intención era obtener ganancias. Después de predicar en Samaria, Felipe fue llevado por el Espíritu al desierto y para hablar de Jesús a un Etiope que era oficial de la reina de Candace, este creyó en Jesús y fue bautizado.

En la Práctica
Esteban y Felipe fueron elegidos dentro de los primeros siete servidores de la iglesia; Esteban fue el primer mártir y Felipe el primer misionero. Esteban fue un apologista y Esteban un evangelista. Esteban predicaba el mensaje de Jesucristo y los de la sinagoga de los Libertos se enojaron y lo acusaron. Esteban les mostraba con las Escrituras que Jesús es el Cristo. Al ver que no podían con la sabiduría de Esteban, le hicieron dos cargos: Blasfemar en contra del Templo y blasfemar contra la Ley de Moisés. Esteban, a través de un resumen de la historia de Israel les muestra como han resistido a Dios. Rechazaron a José, quien como Cristo, fue humillado y luego exaltado. Rechazaron a Moisés quien fue librado de la muerte (así como Cristo fue librado de la muerte por la resurrección. Moisés escogió sufrir voluntariamente así como Cristo escogió hacerse hombre. Moisés fue rechazado por los suyos, así como Jesús fue rechazado. Rechazaron también la Palabra de Dios que Moisés les habló, volviéndose a Egipto en sus corazones y siendo idólatras. Se aferraron a sus tradiciones, al templo y sus ritos además de que endurecieron sus corazones matando a los profetas, a Jesús y ahora a Esteban. Esto es lo mismo que sucede en nuestros días, la gente tiene una noción de Dios equivocada de Dios porque no conocen la Palabra de Dios. Dios se ha revelado en Jesucristo; y su Palabra, la Biblia, nos dice quien es Dios. Sin embargo algunos rechazan el amor y la salvación de Dios, algunos son duros de corazón, otros se aferran a las tradiciones. Felipe predicó el evangelio en la ciudad de Samaria y en el desierto y el Señor salvó a mucha gente. Simón un mago que creyó, lo hizo para obtener ganancias. Así hay muchos que desgraciadamente dicen creer pero solo para hacer mercadería del evangelio. Pero, tanto como Felipe y Esteban nos dan grandes enseñanzas de un siervo de Jesucristo. Ellos cumplieron con su misión. ¿Estas cumpliendo la tuya?

En Oración
Señor, gracias por hombres y mujeres comunes y corrientes quienes se entregaron de corazón a ti para hacer una obra poderosa. ¡Que pueda ser un hombre entregado de corazón! Por Jesucristo, amén.

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