En la Palabra
1 Samuel 13-14
Los filisteo se juntaron contra Israel, Saúl ya había gobernado un año. En el segundo año de su reinado juntó al ejercito para pelear contra los filisteos que tenían un ejercito de treinta mil carros y mil hombres de a caballo. El ejercito de Israel se atemorizaba mientras esperaban a Samuel. Al ver que la gente comenzaba a desertar, Saúl realizó un sacrificio a Dios. Cuando llegó Samuel le dijo que había hecho locamente y ahora el reino le sería quitado y Dios había buscado a un hombre conforme a su corazón.
Jonathan, el hijo de Saúl, mostró gran fe cuando juntamente con su paje de armas fue a la guarnición de los filisteos diciendo: “El Señor salva igualmente con muchos o con pocos.” Jonathan y su paje causaron temor en el ejercito filisteo. Saúl aquel día hizo hacer un juramento al ejército israelita de que no tomarían nada de comer hasta derrotar a los filisteos bajo pena de muerte. Jonathan no escuchó el juramento y comió miel. Cuando fue descubierto, Saúl juró por el Señor que Jonathan debía morir, sin embargo el pueblo intercedió por Jonathan.’
En la Práctica
Una gran enseñanza que aprendemos de este pasaje es acerca de actuar de acuerdo a los principios de Dios y en el tiempo de Dios. Saúl no debía ofrecer sacrificios a Dios, solo los sacerdotes podían ofrecer sacrificios; Saúl debía esperar a Samuel. Sin embargo se adelantó y actuó independiente de lo que Dios estableció. El resultado fue terrible para Saúl, Dios le quitaría el reino y se lo daría a un hombre que fuera conforme al corazón de Dios. La forma de actuar de Saúl era inconsistente con los principios de Dios; no consultaba a Dios sino que actuaba de acuerdo a su propio parecer. Los hábitos son difíciles de quitar; en el tiempo de los jueces recordemos como no había rey, cada uno hacia lo que bien le parecía. Saúl como rey no aprendió a vivir sujetándose a los principios de Dios. Nosotros estamos viviendo en un tiempo donde la gente rechaza a Dios como rey y cada uno hace lo que bien le parece. Aún en la iglesia hay muchos que no han dejado los hábitos del mundo y continúan actuando en base a su propia opinión. Dejemos de actuar independientes de Dios y llevemos gloria a su nombre y actuemos de acuerdo a los principios de Dios.
En Oración
Señor reconozco que hay ocasiones en que como Saúl, actúo independiente de tus principios, te pido perdón y que pueda ser sabio para vivir de acuerdo a tu Palabra. Por Jesucristo, así sea.
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