Tuesday, February 28, 2012

Lecciones Prácticas para la Vida Crisitana


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Para ver las predicas del pastor Alex: http://apexbaptist.org/#/en-espaol/videos

En la Palabra
Lectura: Números 11-13

Por primera vez después de la idolatría en el monte Sinaí cuando adoraron al becerro de oro, el pueblo comienza a quejarse por no tener carne para comer. Dios envía fuego que quema las orillas del campamento. Cuando vio Moisés esta actitud del pueblo le dolió mucho al grado que le preguntó al Señor por qué tenía Moisés que llevar a ese pueblo y de dónde iba a sacar carne para darles de comer. Tal fue la desesperación de Moisés que le pidió a Dios que le diera muerte. Dios responde diciendo a Moisés que consiguiera 70 varones y los trajera delante del tabernáculo, allí Dios puso del espíritu que dio a Moisés en los varones quienes profetizaron.
Dios envió codornices por un mes para que el pueblo comiera carne hasta quedar hartos, pero también envío una plaga que trajo muerte al pueblo y dice la Biblia que fue por codicioso.
Aarón y María murmuraron contra Moisés porque había tomado una mujer que no era Israelita. Dios les juzgo por hablar en contra de Moisés y María quedó leprosa. Moisés, que dice este pasaje en Números 12 era el varón mas manso de la tierra, intercedió por María y Dios la restauró pero debía permanecer fuera del campamento por 7 días durante los cuales Israel no pudo seguir adelante.
En la lectura de este día también leemos de la asignación de 12 espías, uno por cada tribu, que Moisés envía para reconocer la tierra de Canaán. Cuando regresaron dieron un buen reporte de la tierra, pero 10 de ellos infundieron temor al pueblo diciendo que no podían conquistarla, que los pueblos en ella eran numerosos, que eran guerreros, que las ciudades eran amurallada e inclusive que había gigantes. Solo Caleb y Josué creían que podían entrar y conquistar la tierra.

En la Práctica
Estos capítulos están llenos de enseñanza para todo creyente. En primer lugar nos habla de la influencia negativa de los incrédulos sobre el pueblo de Dios. Aquellos que comenzaron a quejarse fueron los extranjeros que se mezclaron con el pueblo y habitaban en las orillas del campamento. Así hay personas que no son creyentes, pero que están entre el pueblo de Dios, nunca se acercan a la presencia de Dios para habitar con El, pero constantemente se quejan e influyen al pueblo de Dios. Esto no quiere decir que los creyentes no tienen responsabilidad. Cada uno es responsable ante Dios de su comportamiento.
También aprendemos lo grave de murmurar contra los líderes puestos por Dios. Aunque Moisés hizo algo incorrecto, es Dios quien juzga a sus líderes. Aparentemente Aarón y María pensaron que Dios iba a quitar a Moisés del liderazgo y los iba a poner a ellos.  ¿Solamente por Moisés ha hablado Jehová? ¿No ha hablado también por nosotros? Y lo oyó Jehová.” (12:2). Dios tiene que juzgar a quien murmura y por causa de ellos el pueblo no puede seguir adelante. Dejemos que Dios sea el juez aún cuando nuestros líderes a nuestros ojos están equivocados. Tristemente hay muchas personas que les interesa la posición y el poder. No les interesa el bienestar de los hermanos, especialmente de sus líderes y muchas veces los quieren hundir y cargar de críticas.
Finalmente tenemos una lección de fe. Aunque Dios había prometido darles la tierra de Canaán, los espías no confiaron en la Palabra de Dios sino que solo miraron las circunstancias. Las dificultades eran reales. No se trata tampoco de ignorar la realidad, la fe puede ver la realidad pero confía en que Dios es poderoso para vencer las circunstancias. Los obstáculos son aquellas cosas que ves cuando dejas de ver a Dios.

En Oración
Gracias Señor por tu Palabra y por la enseñanza maravillosa que me das a través de ella. Necesito de tu sabiduría para vivir de acuerdo a tu Palabra y honrarte con mi vida. Por Cristo te lo pido, amén

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